En los últimos meses, has tenido que escuchar en más de un medio de comunicación que el presente año es considerado el más seco de la década. Más de un cuidad de nuestro país se encuentra afectada, por la catástrofe natural conocida como sequía.
Nuestro País siempre se ha caracterizado por tener épocas de sequías, pero la actual está sobrepasando los límites. Vaciando nuestros embalses, acuíferos y provocando un elevando estrés en zonas de cultivos y bosques. Las actividades de agricultura consumo un elevado porcentaje de este recurso. En los últimos 12 meses la reserva hidráulica española ha llegado disminuir hasta el volumen de agua equivalente al de la cuenca del Ebro (7.511 hm3 de capacidad) o del Guadalquivir (8.131 hm3 de capacidad).
Hace menos de 24 horas la organización ecologista Greenpeace denuncio el mal estado de nuestro país. Señalando que la península ibérica estaría entrando en un período de sequía. Agravado por el cambio climático y la mala gestión del agua. Aunque la sequía puede suceder en cualquier zona, los hábitos negativos del ser humano en contra del Medio Ambiente favorecen a este tipo de catástrofes. Los números del bajo nivel de agua disponible en que nos encontramos hacen sonar las alarmas. Actualmente la reserva de agua embalsada en superficie a escala nacional se encuentra a un 40%. No se puede perder ni un segundo más y empezar a plantear medidas. Si no habrá dramáticas consecuencias ambientales, sociales y económicas. Hay que empezar aplicar políticas de prevención, ahorro y optimización de los recursos hídricos.
Lucha contra la sequía
Entre los factores que afectan a la perdida de los residuos hídricos, se encuentra la contaminación. Actualmente, nuestros ríos son el último destino de parte de los residuos urbanos e industriales. Si, se llevasen a cabo las acciones correctas para evitar la contaminación del agua, se obtendría más recursos hídricos que construyendo nuevos embalases o canalizaciones.
La sequía acentúa tanto en zonas del noroeste como el sureste peninsular. Algunas de las zonas que se encuentran más afectadas son el sur de Cantabria y Liébana, con un 40% menos de lluvia. El bajo nivel de los caudales de los ríos en diferentes zonas de Galicia, se plantean activar la alerta por sequía. Amplias zonas de Cantabria y Castilla y León y algunas de Canarias occidental. Zonas aisladas de Extremadura y en el interior de Andalucía.
Hay que actuar y empezar a trabajar en las posibles medidas tanto a medio y largo plazo Algunas de estas posibles medidas para luchar contra el cambio climáticos, y evitar la sequía, son:
Modernización regadíos
Revisión de las concesiones. Incrementar el control de las concesiones de usuarios de regadío para evitar que se malgaste.
Los precios del agua