Grupo alimentario español dedicado a la fabricación, comercialización y distribución de platos preparados congelados para canales “horeca”, “food service” y “alimentación moderna”. Solicito los servicios de J. Huesa para el diseño, fabricación y suministro de una planta de tratamiento del agua para cubrir las necesidades de sus instalaciones.
Sistema de Ósmosis Inversa para adecuación del agua
Según las necesidades del grupo alimentario, se ha instalado un sistema de ósmosis inversa preparado para producir un caudal de permeado de 10 m3/h. Este sistema se ha provisto de 2 filtros bicapa totalmente automatizados para tratar el doble de la producción. La instalación está configurada de forma que el cliente puede “bypasear” la planta de ósmosis inversa. Dependiendo de los requerimientos de calidad de agua que el cliente que necesite en cada momento, el cliente podrá disponer de agua filtrada, agua osmotizada y agua mezcla.
Ambos filtros están provistos de valvulería neumática. Por lo tanto, su régimen de funcionamiento como sus ciclos de limpiezas, se realizan de forma automática. La línea de tratamiento de agua consta de filtros bicapa (aluminio-silicato). Con frontales de valvulería automáticos para que retenga los diferentes sólidos en suspensión que pueda arrastrar el agua de entrada.
Una vez el agua se ha filtrado, si el requerimiento es de acumular agua osmotizada, el agua filtrada entra en el skid de ósmosis. A la entrada del mismo, se dosifican antiincrustante y secuestrante. Estos son productos químicos cuya función es la de impedir que se produzcan incrustaciones de sales en el interior de las membranas. Así como eliminar el cloro presente en el agua aumentando su valor reductor, y de esta manera terminar de proteger las membranas. Posteriormente, se hace pasar el agua por un prefiltro de seguridad de 5 micras, para asegurar que el agua va limpia de sólidos.
Una vez el agua esta preparada, se impulsa mediante bombas de alta presión a las carcasas de osmosis. La instalación se han dispuesto 2 carcasas de 5 membranas semipermeables y dispuestas para que trabajen en paralelo. Gracias a las características de las mismas, suponen una barrera bacteriológica en el agua producida. Eliminando posibles problemas bacteriológicos en la instalación.
Beneficios de la instalación
Una peculiaridad de esta instalación es que existe una recirculación del rechazo que produce la planta, a la entrada de la misma. De esta manera, y siempre que el agua de entrada no contenga un valor de conductividad excesivamente alto. Se puede reaprovechar el rechazo introduciéndolo nuevamente en la osmosis, y de ese modo, se eleva la conversión de la planta hasta el 75%.
Como en la gran mayoría de plantas diseñadas y fabricadas por J. Huesa. Los equipos de instrumentación y control (válvulas automáticas, presostatos, transmisores de presión…) se controlan desde un cuadro eléctrico, provisto por un autómata que gobierna la planta y una pantalla táctil para su manejo. Todo ello hace que la supervisión para el correcto funcionamiento de la planta sea mínima.
Se ha optado por la solución más óptima para solucionar las necesidades del grupo alimentario. Con un menor consumo de material fungible para su funcionamiento:
- Producto químico antiincrustante y secuestrante para la protección de las membranas.
- Elementos filtrantes de 5 micras para protección de membranas. Su periodicidad de cambio dependerá de la producción y de la calidad física del agua de aporte.
- Elementos filtrantes, aluminio-silicato, se recomienda su cambio cada año.