Skip to main content

Una importante multinacional española del sector metalúrgico, dedicada a la producción y fabricación de perfiles y accesorios de aluminio, contactó con J. HUESA para diseñar, fabricar e instalar una planta de tratamiento y adecuación del agua para poder introducirla en sus nuevas líneas de producción y poder continuar expandiéndose dentro y fuera de nuestro país. En esta ocasión, las actuaciones se realizaron en dos de sus principales centros de producción. Uno situado en Sevilla (España) y el otro en Larache (Marruecos).

Los equipos se diseñaron para mantener la conductividad por debajo de 10 µS/cm2 en el agua de los baños de enjuagues de la línea de producción. Mediante resinas de intercambio iónico (resinas aniónica y catiónica). El Desmineralizador Dúplex, está diseñado para tratar un caudal de 12 m3/h de desmineralizada / desionizada. El equipo de desmineralizador, desde primera hora se concibió como un equipo Dúplex, es decir, dos líneas de tratamiento paralelas. De esta forma se asegura que la producción de agua desmineralizada no se detiene por agotamiento de la resina. Cuando en una de las líneas se produce este hecho, entra en fase de regeneración de la resina de intercambio iónico. Mediante la adición de productos químicos. Mientras que la segunda línea puede seguir produciendo agua de entrada al proceso productivo.

El equipo se alimenta de agua que se recircula sobre los propios baños de tratamiento de superficie. Y se compone principalmente de tres botellas que contienen en orden: carbón activo, resina catiónica y resina aniónica. La función de la botella de filtración de carbón activo es retener posibles arrastres de detergentes, materia orgánica, aceites y grasas. Una vez el agua pasa por la botella de carbón activo, se introduce en la botella que contiene la resina catiónica. Donde quedan retenidos los cationes y se incorporan al agua iones hidrógeno (H+). En tercer lugar, el agua pasa a través del lecho de resina aniónica. Donde se retienen en esta ocasión los aniones y se incorporan los iones hidroxilo al agua (OH-).

Es de esta manera como se eliminan los aniones y cationes del agua de recirculación de los baños. Dando lugar a iones hidrógeno e hidroxilo que reaccionarán para dar agua. Y esta agua desmineralizada se vuelve a introducir en los baños para que el proceso productivo pueda continuar.

La capacidad de intercambio de las resinas es limitada y cuando se agota debe procederse a su regeneración. El proceso de regeneración consiste en hacer pasar ácido clorhídrico a través de la resina catiónica e hidróxido sódico a través de la aniónica. De forma que estos regenerantes desplazan a los iones retenidos sustituyéndolos por H+ y OH- respectivamente. Dichos productos químicos de regeneración son introducidos en a las botellas mediante bombas neumáticas.

El proceso de regeneración se puede realizar bien de manera automática. Gracias a las electroválvulas de accionamiento neumático que componen el equipo. Y se inicia cuando la producción de agua de mala calidad persiste durante un corto periodo de tiempo predeterminado. O bien, se puede forzar de manera manual mediante el control del autómata, que es quien controla el equipo dúplex.

Las principales ventajas a considerar del método de desmineralización dúplex mediante intercambio de resinas son:

– El sistema dúplex nos permite trabaja en continuo, sin necesidad interrupciones en la línea de producción, ya que si una de las líneas debe regenerar por agotamiento de resinas, entra en funcionamiento la otra.

– El sistema es totalmente automático, puede trabajar hasta 24 horas diarias, con una supervisión mínima. No precisa de personal con cualificación especial.

– Los equipos son muy versátiles y de alta eficacia (siempre que no se trabaje con grandes concentraciones de sales).

– Actualmente las resinas tienen altas capacidades de tratamiento, resultando compactas y económicamente viables. Las resinas también son productos muy estables químicamente, de larga vida útil (4-5 años en condiciones óptimas) y de fácil regeneración.

– Los productos fungibles son escasos, reduciéndose a los siguientes componentes:

• Productos químicos (ácido y sosa) para la regeneración de las resinas.

• El elemento filtrante, como el carbón  activo, se recomienda su cambio cada 1-2 años.

Deja un comentario